Cook Up an Eco-Friendly Kitchen for the Holidays

Prepare una cocina ecológica para las fiestas

 

Por Martina Guelfi

A menudo se dice que la cocina es el corazón del hogar, y eso nunca es más cierto que durante las vacaciones. Un centro para invitados y seres queridos cansados ​​de viajar, un escenario para la alegría y la conversación, el espacio ajetreado donde se preparan cenas festivas: la cocina es el único lugar al que todos inevitablemente gravitan.

Con las vacaciones acercándose rápidamente, ¿es hora de un cambio antes de que la familia y los amigos lleguen con alegría y espíritu festivo? Lo que nos lleva a otro feriado completamente arbitrario e inventado que apostamos a que nunca supiste que existía: el 15 de noviembre es el Día Nacional de Limpiar el Refrigerador en los Estados Unidos. S.

Los expertos en economía doméstica de Whirlpool Home Appliances marcaron el día de 1999 con el objetivo de alentar a las personas a limpiar sus refrigeradores antes de las vacaciones de otoño e invierno. Cuando se lanzó la iniciativa, la empresa también proporcionó un número gratuito al que la gente podía llamar para pedir consejo sobre cómo obtener el mejor resultado posible.  ¿Pero por qué detenerse en el refrigerador? En cambio, cuando lleguen las vacaciones, su familia y amigos encontrarán no solo un refrigerador inmaculado, sino también un espacio habitable rediseñado para ser lo más ecológico posible.

Llame a los profesionales

Si debe construir su cocina desde cero, es posible que necesite el apoyo de un profesional. En ese caso, opte por un contratista familiarizado con las diversas opciones ecológicas disponibles en el mercado actual. Su experiencia en el campo le ahorrará tiempo y dinero. Y, sin duda, podrán aconsejarle sobre los productos y soluciones ecológicas más adecuados para sus necesidades.

Elija estufas de bajo consumo 

¿Qué sería de una cocina sin estufa? Sin embargo, elegir el tipo de fuente de alimentación puede ser difícil: el gas natural es un combustible fósil, pero la electricidad puede provenir de fuentes como las centrales eléctricas de carbón. He aquí un resumen rápido:  

  • Cocinas a gas: Muchos cocineros aprecian estas cocinas porque facilitan el control de la temperatura, calientan instantáneamente y no desperdician calor al final de la cocción. Si esta es su elección, vigile la salida de BTU: cuanto menor sea, mayor será la eficiencia energética; sin embargo, estos electrodomésticos pueden agregar entre un 25% y un 39% más de NO2 y CO al aire de su casa.
  • Placas de inducción: Transfieren energía electromagnética directamente a la cocina, utilizando menos de la mitad de la energía de las cocinas equipadas con una bobina estándar. La desventaja es que estas placas solo son adecuadas para utensilios de cocina de metal; el aluminio y el vidrio no funcionan. También tienden a ser caros.
  • Vitrocerámicas: Son las mejores soluciones para la eficiencia energética. El calor se entrega instantáneamente y los cambios de temperatura se registran rápidamente, y son fáciles de limpiar, ¡lo cual es una buena ventaja! Sin embargo, para que funcione correctamente, el contacto entre la bandeja y la superficie debe ser muy preciso; incluso un fondo ligeramente redondeado desperdiciará energía.
  • Estufas con serpentines eléctricos: No son la opción más eficiente, pero aún pueden ser una opción. Lo importante aquí es optar por el modelo con la certificación más alta y comprar electricidad de fuentes renovables.

Presta atención a la elección de los electrodomésticos 

Hoy en día, no es difícil encontrar electrodomésticos de bajo consumo en el mercado. Reemplazar tus viejos electrodomésticos de cocina te ahorrará dinero y ayudará al planeta. Además, puede comunicarse con empresas y servicios que ofrecen programas especiales de devolución para deshacerse de los electrodomésticos que ya no usa. En cuanto a las nuevas adiciones a su cocina, asegúrese de investigar. Por ejemplo, es posible que desee un nuevo lavavajillas para ayudarlo a usar menos agua, pero aún debe investigar estos factores:

  • calificación energética;
  • robustez, por lo que no tendrá que reemplazarlo durante mucho tiempo;
  • simplicidad de diseño, ya que los accesorios innecesarios pueden consumir energía.

Si está buscando un refrigerador, es fácil dejarse seducir por modelos grandes y relucientes. Pero, ¿realmente los necesitas? Muchos alimentos, como la fruta, no necesitan almacenarse en frío. Por el contrario, la baja temperatura podría hacer que se estropeen más rápido. Además, tener un espacio de almacenamiento limitado lo alentará a comprar de manera más consciente, evitando no solo el desperdicio de electricidad sino también el desperdicio de alimentos.

Invertir en utensilios de cocina 

Todo el mundo ha sido culpable de comprar una olla solo porque era barata. Pero, ¿cuánto tiempo duró antes de que fuera necesario reemplazarlo? Abandone el teflón e invierta en utensilios de cocina de acero inoxidable o hierro fundido. Puede costar más inicialmente, pero le ahorrará dinero a largo plazo. Lo mismo ocurre con los utensilios de cocina: elija cucharas, cubiertos, cuchillos y accesorios que duren. Evita la madera, que con el tiempo se pudrirá y, por supuesto, el plástico.

Lleva la ecología a la cocina 

Ahora que su nueva cocina ecológica está amueblada y equipada, pongámonos manos a la obra: ¿qué ponemos en la mesa para la cena? Muchas recetas y técnicas de cocina te ayudarán a consumir menos energía.

Primero: el horno. ¿Sabías que no necesitas precalentarlo? La mayoría de los modelos modernos alcanzan temperaturas máximas muy rápidamente. El precalentamiento está prácticamente obsoleto a no ser que estés preparando una receta especialmente delicada, como un soufflé. El horno consume mucha energía, por lo que solo debes usarlo cuando sea necesario.  Una alternativa, siempre que sea posible, es usar una tostadora o un microondas con una calificación energética alta. Esto puede reducir su consumo de energía hasta en un 80%. Además, puede hacer que su cocina sea más ecológica con estos consejos rápidos: 

  • Preste atención a la cocina, no la deje encendida más tiempo del necesario y regule la llama.
  • Prueba recetas cocinadas en olla a presión, lo que te permite reducir el tiempo de cocción hasta en un 70%.
  • Pruebe platos que no requieran cocción, como ensaladas, o que no necesiten ser recalentados cuando se comen más tarde.
  • Si es posible, evite los alimentos precocinados o congelados.

Por supuesto, tanto por su salud como por la del planeta, busque siempre ingredientes orgánicos y de origen local. Tus amigos y familiares apreciarán la excelente comida y, por supuesto, tu nueva cocina ecológica y de bajo consumo.

 

volver al blog